- Corporación Contigo Mujer
- Organización no gubernamental, feminista, de la ciudad de Pereira, Colombia, con personería jurídica desde 1999, que trabaja por los derechos humanos de las mujeres.
Integrantes
Junta Directiva
María Victoria Ramírez Martínez
Representante Legal
Liliana Herrera
Tesorera
Magola Vélez Granada
Secretaria
jueves, 20 de octubre de 2011
Intervención audiencia pública PAL 06/11 Senado “por medio del cual se adiciona el artículo 11 de la constitución política, sobre el derecho fundament
Senadora Gloria Inés Ramírez, señoras y señores congresistas, compañeras de panel, señoras y señores asistentes.
Recientemente la Guttmacher Institute dio a conocer una investigación según la cual en Colombia ocurren cerca de 400.000 abortos inducidos al año, de los cuales en promedio sólo 332 son procedimientos legales, o Interrupciones Voluntarias del Embarazo (IVE) practicadas en instituciones de salud.
Dirían algunos que estas cifras ponen en evidencia que son pocas las mujeres que al encontrarse bajo alguna de las causales de aborto despenalizadas por la Corte Constitucional en la Sentencia C- 355 de 2006, deciden voluntariamente interrumpir su embarazo. Sin embargo, esta información lejos de ejemplificar dicha situación, lo que evidencia es que quienes deciden abortar legalmente se ven enfrentadas a un sin número de obstáculos y barreras que hacen que para muchas de ellas sea más fácil, menos costoso y más confidencial acudir a servicios médicos clandestinos
Entre mayo de 2006 y diciembre de 2010, el servicio jurídico de La Mesa asesoró a 222 mujeres que al encontrarse dentro de las causales despenalizadas decidieron interrumpir voluntariamente su embarazo, pero al solicitar los servicios de salud requeridos se encontraron con obstáculos o negaciones injustificadas en la prestación de los mismos, que llegaron incluso a poner en grave riesgo sus vidas y su dignidad.
Cuando una mujer decide terminar su embarazo porque su continuación pone en peligro su vida o su salud, algunos proveedores de salud se abstienen de brindar la información requerida, induciendo al error bien sea porque no se describen correctamente los riesgos de interrumpir el embarazo o porque no se da la información en su totalidad, incidiendo irregularmente en la decisión de las mujeres.
Hemos documentado casos en los cuales se obliga a las mujeres a tomar decisiones sobre su salud reproductiva en contra de su voluntad, siendo víctimas de irrespeto e interferencias arbitrarias sobre las opciones que éstas han tomado. De esta forma, algunos médicos deciden el tipo de interrupción, basados en su propia apreciación sobre la gravedad del riesgo o en la imposición arbitraria del “dolor- castigo” que las mujeres están obligadas a soportar.
Hay que decir que casi siempre se somete a las mujeres a largas esperas, pues la autorización de los procedimientos se condiciona a exámenes y certificaciones adicionales, juntas de especialistas y comités de ética médica, claramente en contravía de los señalamientos de la Corte en donde se ha señalado que no se pueden aumentar o complejizar los requisitos establecidos por la Sentencia c-355 de 2006.
Frente a las interrupciones solicitadas en los embarazos en donde las malformaciones del feto hacen incompatible su propia vida, las mujeres se enfrentan a varios obstáculos entre los que sobresale que debido a que los planes de beneficios no contemplan los exámenes requeridos para tener diagnósticos tempranos de graves malformaciones fetales, las solicitudes y las respuestas se dan de maneras tardía y se traducen en embarazos avanzados y una mayor dificultad en la autorización y realización del procedimiento de interrupción del embarazo.
En muchos casos el personal médico se niega a certificar las malformaciones, pese a tratarse de problemas que con certeza evidencian la inviabilidad del feto, y la duda con respecto a la viabilidad fetal a causa de la malformación se resuelve en contra de los derechos de las mujeres, pues las obligan a esperar a que nazca el producto con un pronóstico reservado sobre sus posibilidades de vida sometiéndolas a tratos crueles y degradantes.
Como si este escenario no fuera lo suficientemente desalentador, aquellas mujeres que solicitan la interrupción de su embarazo amparadas en la causal violencia sexual, además de encontrarse con las trabas médicas ya descritas, se enfrentan a las graves fallas en el acceso a la justicia. Recordemos que para solicitar los servicios de salud se requiere la respectiva denuncia, y que muchas mujeres temen denunciar los hechos de violencia por las múltiples barreras que encuentran y la baja efectividad de la justicia para judicializar y castigar a los victimarios. El miedo, la falta de confianza en las autoridades judiciales, y la falta de información sobre los derechos que tienen las víctimas de delitos sexuales hacen que las mujeres decidan denunciar tiempo después de los hechos de violencia, nuevamente en estados avanzados de embarazo.
Resulta paradójico que la atención en salud sea un servicio prioritario para quienes han sido víctimas de un delito sexual, no solo en relación con la investigación del crimen sino como parte de la atención integral y del resarcimiento de los derechos, y sin embargo, los protocolos diseñados para tal fin funcionan de manera irregular, no hay información ni suministro oportuno de la Anticoncepción Oral de Emergencia, ni tampoco información adecuada sobre los derechos reproductivos y la opción de interrumpir voluntariamente un embarazo resultado de un delito sexual. Además es recurrente que se impongan requisitos adicionales como autorizaciones u órdenes judiciales y que los proveedores de servicios de salud actúen por fuera de sus competencias realizando juicios de valor sobre los hechos violencia sexual a los que ha sido sometida una mujer
Aquí si Ustedes me lo permiten, haré referencia a la objeción de conciencia médica que coincidencialmente también está siendo discutida en la Comisión Primera de la Cámara de Representantes en donde el 20 de julio se radicó un proyecto de ley estatutaria para reglamentarla de manera restrictiva para las mujeres.
En Colombia, la objeción de conciencia médica en casos de aborto se encuentra reconocida y claramente delimitada por la Corte Constitucional, que ha señalado que el derecho de profesionales de la salud a profesar las creencias de su elección puede protegerse mediante este mecanismo pero que este no puede ser utilizado para obstruir los derechos de las mujeres que optan por un aborto.
Sistemáticamente la objeción de conciencia está siendo mal empleada, pues se ha convertido en un ABUSO DE CONCIENCIA y en un instrumento para obstaculizar el ejercicio de derechos de las mujeres, ya que se realiza sin el cumplimiento de los requisitos legales, es decir, negándose a brindar información, intentando persuadir a la mujer, cometiendo actos de maltrato y discriminación y vulnerando la confidencialidad y el secreto profesional. Algunas instituciones de salud han hecho que sus profesionales firmen pactos colectivos o se han rehusado a proveer los servicios de aborto.
Siendo las prestaciones de servicios de salud un servicio público que tiene relación directa con derechos fundamentales, es obligación de los proveedores tener especial observancia con las normas que los rigen, no solo absteniéndose de incumplirlas sino promoviendo su especial cumplimiento.
Como se puede ver actualmente la autonomía, la vida y la salud de las mujeres se encuentran gravemente comprometidas en lo que a la interrupción voluntaria del embarazo respecta. Nos preocupa profundamente que aún con la reglamentación vigente las mujeres y las niñas se tengan que someter a estos tratos crueles e inhumanos con el fin de proteger su vida y su salud. ¿Qué pasaría con ellas, con Ustedes, con nosotras, conmigo, con Usted si la propuesta populista del Partido Conservador se convierte en una ley de la República?
Sin duda las implicaciones de la aprobación de una reglamentación restrictiva van más allá de las discusiones morales y religiosas, ya que impactan profundamente la vida de aquellas que tienen la mala suerte de tener que someter la decisión de salvar su vida a quienes no quieren protegerla.
Muchas gracias por su atención.
Fuente: http://congresovisible.org/agora/post/intervencion-audiencia-publica-pal-0611-senado-por-medio-del-cual-se-adiciona-el-articulo-11-de-la-constitucion-politica-sobre-el-derecho-fundamental-a-la-vida-humana-beatriz-quintero/2558/
jueves, 18 de agosto de 2011
Campaña por Dora Consuelo
El 17 de junio en horas de la mañana con el acompañamiento de dos integrantes de la Corporación, consuelo empieza el proceso de denuncia ante la Fiscalía de La Virginia por Violencia Intrafamiliar contra su expareja. Ella es remitida ante Medicina Legal para Informe Técnico de Lesiones no Fatales. El perito forense, Dr. José Federico Gartner Vargas le da una incapacidad médico legal de cinco (5) días, lo que da cuenta de la gravedad de sus lesiones. Además de las lesiones en ese momento, ella muestraba cicatrices de lesiones realizadas con un machete hacía seis meses. Las agresiones, entonces, han sido sistemáticas.
El Asistente de Fiscal II, jefe de sala de denuncias, hace la solicitud de medida de protección al comandante de la Policía Metropolitana de Pereira para garantizar la seguridad personal y familiar de la víctima. Cabe aclarar que aunque los hechos se presentan en La Virginia, dado que Consuelo se traslada al Barrio Nuevo Caimalito Casa 14 A, donde su hermano, el sitio donde ella reside y el refugio solo están separados por el puente sobre el río Cauca, que separa los municipios de La Virginia y Pereira, y el agresor conoce el sitio. Hasta allí se desplazó a amenazarla. La policía acató la solicitud de la Fiscalía, ha estado atenta a los llamados de Consuelo.
Sin embargo un agente, en presencia del agresor, le dijo que debían arreglar el asunto lo antes posible porque la policía debía atender muchos otros asuntos. El día domingo 19 de junio, ella fue a retirar sus cosas y encontró al hombre dentro de su casa con otra mujer, durmiendo en la cama de sus hijas, ante este hecho se desató otro episodio de violencia, pero que la policía pudo contener.
Cabe resaltar que Consuelo había denunciado al agresor hace 8 meses pero ante la conciliación, propuesta por la Fiscalía, Consuelo desistió de la demanda. El hombre regresó, se quedó a la fuerza en su casa, la obligaba a tener relaciones sexuales, la sometía a agresiones físicas, verbales y a maltrato psicológico, lo que ha provocado una lesión difícil de sanar en su autoestima. Repetidas veces la hizo sentir, en palabras que ella misma expresa: “me hacía sentir como basura, que yo no valía nada y yo no hacía nada porque me daba mucho miedo que me matará o mis niñas”.
Por lo anterior, y porque Consuelo presentaba un cuadro clínico de crisis depresiva con ideaciones suicidas, Fabiana Betancourt, psicóloga y Directora Ejecutiva de la Corporación Contigo Mujer le ofreció refugiarse temporalmente en la finca de su propiedad ubicada en el municipio de Santa Rosa de Cabal, Risaralda, con sus cuatro hijas de 6, 10, 12 y 16 años de edad. Ella de manera personal y por solidaridad asumió los gastos durante un mes hasta hace algunas semanas cuando las niñas de Dora Consuelo debían iniciar sus estudios y Dora Consuelo tomó la decisión de regresar a La Virginia y de nuevo Fabiana la apoyó con el arriendo de dos meses. Dora Consuelo venía mejorando su estado de ánimo y de sus lesiones físicas gracias a su estadía en un lugar tranquilo y seguro.
Lamentablemente esta semana fue brutalmente golpeada de nuevo por el agresor, le fracturó un brazo y tiene contusiones en cabeza, torax, piernas, fue bestial la arremetida. El día martes, Fabiana Betancourt la acompañó de nuevo a la Fiscalía, el proceso va en marcha, pero le dicen que aguante mas o menos 15 días hasta que el caso vaya a donde el Juez. La policía ha actuado diligentemente pero en el último ataque ella no contaba con un celular para poder llamar a la policía y, mientras su hija llego hasta la estación a pedir ayuda, el hombre casi la mata.
En este momento Dora Consuelo está incapacitada y sin posibilidad de buscar el sustento para ella y sus cuatro hijas, pues ella trabaja en labores domésticas y elabora algunas artesanías, pero por la fractura, no puede hacerlo.
Acudo a la solidaridad de todas para apoyar a esta mujer que ha tenido la valentía de denunciar al agresor y quiere ir hasta las últimas consecuencias, pero por nuestros pocos recursos y su propia situación económica no pudimos garantizar que estuviera más tiempo fuera, además ella no quería entorpecer los estudios de sus hijas y dejar su espacio mientras el agresor sigue por allí suelto.
En este momento lo urgente es poder garantizarle la alimentación a ella y a sus cuatro hijas, mientras se recupera y que tenga acceso a un teléfono celular permanentemente para pedir ayuda. Adicionalmente, para garantizar el acompañamiento jurídico y psicológico que se requiere para llevar la denuncia hasta las últimas consecuencias.
Si alguien quiere apoyar el caso de Dora Consuelo, les solicitamos consignar su ayuda en la Cuenta de ahorros de la Corporación Contigo Mujer de Colmena BCSC No 26506952238 y en la consignación especificar caso Dora Consuelo Herrera. Si el apoyo es en alimentos o de otra índole, pueden comunicarse a este correo corporacioncontigomujer@gmail.com o al celular 314 6798409, de Liliana Herrera Naranjo, Tesorera de la Corporación.
LES PEDIMOS AYUDARNOS A DIFUNDIR ESTA CAMPAÑA.
viernes, 22 de julio de 2011
Programa sobre ablación en Teleantioquia
http://www.vimeo.com/26376943
Cooperativa Coomigrar es un hecho
lunes, 4 de julio de 2011
Participación de La Red Nacional de Mujeres en la articulación feminista de Mercosur.
El pasado mes de junio la Red Nacional de Mujeres estuvo presente en la en la ciudad de Córdoba, Argentina con el fin de participar y discutir sobre temas como el colonialismo, interculturalidad y multiculturalidad. El país estuvo representado por la Secretaria Técnica de la Red Nacional de Mujeres, la Dra. Beatriz Quintero y la Coordinadora de la red del Centro Occidente y a su vez la Representante de la Corporación Contigo Mujer la Dra. María Victoria Ramírez Martínez, asimismo estuvo la Dra. Ana Cristina González quien vive entre Colombia y Uruguay; y hace parte de la articulación feminista de Mercosur.
En el encuentro asistieron mujeres de algunos países como Brasil, Colombia, Paraguay, Uruguay, Perú, Bolivia y Argentina. En este espacio se articularon experiencias de cómo los movimientos feministas dialogan, interpelan y se relacionan con las mujeres indígenas en estos países.
Una de las conclusiones del encuentro fue “entender que los ritmos, las formas de ver el mundo, las cosmovisiones de las comunidades indígenas son distintas a las nuestras y no significa que sean mejores o peores, pero que hay que tenerlas en cuenta a la hora de construir un movimiento que realmente pretenda el avance de los derechos de las mujeres”, indica la Coordinadora de la red del Centro Occidente la Dra. María Victoria Ramírez Martínez
Acciones para Colombia.
Uno de los objetivos propuestos en el encuentro es implementar una metodología llamada Diálogos interculturales, los cuales consisten en una serie de reuniones que se van ha organizar en cada uno de los países participantes para generar articulación entre mujeres feministas y mujeres indígenas.
En Colombia se realizarán los encuentros con mujeres de 4 comunidades: Las indígenas del Cauca, Embera Chamí de Risaralda y Antioquia, mujeres de La Sierra Nevada de Santa Martha y con mujeres indígenas de Cundinamarca.
La intervención consistirá en unos primeros acercamientos con las comunidades generando diálogos de manera separada y luego se concluye con la escogencia de las representantes de esas regiones, a un encuentro mayor entre mujeres feministas y mujeres indígenas.
“No se tiene establecida una agenda, la idea es llegar a las comunidades en espacios de conversación y reconocernos dentro de la diferencia y mirar que posibilidades existe en trabajar de manera en común por el avance de los derechos de las mujeres, algunas de esas mujeres si ellas deciden, pueden participar del encuentro feminista de América Latina y el Caribe que se va a realizar en el mes de noviembre en Bogotá”, señala María Victoria.
miércoles, 8 de junio de 2011
miércoles, 18 de mayo de 2011
17 de mayo Día Internacional de la Diversidad Sexual
jueves, 14 de abril de 2011
CARTA ABIERTA A AMPARO GRISALES
Amparo: hace poco estuve viendo el lanzamiento de la campaña de tu nuevo producto de belleza para conservar la juventud. Estás muy linda, como siempre. Claro, a mis 68 años me pregunté: ¿para qué la eterna juventud? Y luego me di cuenta de que me preguntaría lo mismo si tuviera 40 o 50 años. ¿Qué haría yo con una eterna juventud? Prefiero mil veces mis arrugas, mi piel no tan firme, mis gorditos en la cintura, mis amigas que envejecen conmigo y mis amigos que siguen creyendo que nosotras las mujeres somos las únicas que envejecemos.
Prefiero un cuerpo que esté en armonía con discursos que reflejan experiencias vitales, porque estoy convencida de que es importante la coherencia entre cuerpo y discurso, entre rostro marcado por la vida y por los amores y desamores que dejan huellas inscritas en la memoria. Y me gusta tener, ya desde hace algunos años, el cuerpo y la cara que merezco, este cuerpo en los albores de la vejez que merece mi recorrido vital. Y creo que ningún "revertex", ningún gen o elíxir de la longevidad, ningún polifenol, podrá cambiar esto. Claro, están los cansancios de las noches después de un día lleno de trabajo y de los encuentros con mujeres diversas de este complejo y multifacético país, encuentros en los que son las palabras las que cuentan y no la imagen corporal.
Entiendo que para ti, Amparo, tu cuerpo, como una de tus principales herramientas de trabajo, haya sido y siga siendo importante. Sin embargo, te quiero decir que cuando pienso en ti, lo que me viene a la mente son tus capacidades actorales e histriónicas que hemos visto en decenas de series y películas. Por supuesto, también recuerdo tu belleza, pero no esa que hoy quieres vendernos.
Amparo, creo sinceramente que no has medido el daño que generan para las mujeres colombianas comunes y corrientes todos estos comerciales y photoshops de figuras femeninas de medidas perfectas. Me pregunto por qué seguir alimentando imaginarios que quisiéramos derrumbar, imaginarios que, en lugar de hacernos sentir bien con nosotras mismas, nos obligan a estar atentas a la secular mirada masculina y a depender del saber y del deseo del otro fijado en casi todas las expresiones de la cultura.
Mi cuerpo me pertenece, y cuando digo que me pertenece significa que lo he expropiado a la cultura. Y te cuento una cosa, Amparo: a mí y a muchas de mis amigas no nos gustaría vivir en un mundo lleno de rostros fijados en una falsa y tramposa eterna juventud. Rostros sin expresiones, muslos y nalgas sin historias. Y cada vez más, feministas o no, hemos aprendido a aceptar, asimilar y asumir nuestra edad, nuestros años y las huellas de ellos, estas huellas biográficas que nos permiten leer o adivinar la riqueza de una vida llena.
Afortunadamente, conozco algunos hombres con imaginación que aprecian nuestros años y sus huellas, que prefieren estar en compañía de mujeres cuyos muslos no son tan firmes, cuya piel ya con manchitas y bastantes surcos en la esquina de su mirada, tienen un mundo para contarles y no juegan a parecer lo que ya no son.
Y no lo digo por ti, Amparo, quien muy seguramente también tienes un mundo para contar, un mundo que hubieras podido contar igualmente con un cuerpo no tan trabajado ni tan entregado a los modelos culturales que nos exigen seguir siendo moldeadas, preformateadas e hipotecadas en un esquema que no hace sino manipular de manera perversa nuestras relaciones con los hombres.
Amparo, no compraré tu elíxir de eterna juventud, porque amo mis años, sus huellas, sus enseñanzas y hace tiempo que ya no les temo a los espejos.
* Coordinadora del grupo Mujer y Sociedad
lunes, 11 de abril de 2011
miércoles, 6 de abril de 2011
TALLER DE PATCHWORK
domingo, 27 de marzo de 2011
Sintonía de la Fiscal con las mujeres
jueves, 24 de marzo de 2011
Jornada del 8 de marzo en Dosquebradas
La Corporación Contigo Mujer participó en la jornada del 8 de marzo de 2011 en el Colegio Cristo Rey de Dosquebradas (Risaralda) en un evento que involucró a ambas jornadas de esa institución, alrededor de 700 niñas y adolescentes en cada jornada para conocer la historia de la conmemoración del día internacional de la mujer y difundir la ley 1257 de 2008.
Para las niñas y adolescentes fue enriquecedor saber que en la historia de Colombia si existen muchas mas mujeres que las que los libros nos muestran y expresaron que reconocen que las mujeres de hace 50 años tenían muy pocos derechos y menos oportunidad de expresarse, todavía en el 2011 tenemos muchas otros luchas por librar y muchos derechos por defender.
Para la Corporación esta experiencia fue muy significativa, porque un gran número de participantes conocían la ley y la saben importante en el papel, también manifestaron que estamos muy lejos de que se este cumpliendo.
Manifiesto de Mujeres Jóvenes el 8 de marzo de 2011

Auditorio Jorge Roa Martínez, Universidad Tecnológica de Pereira
Un saludo lleno de sororidad y amabilidad para todas las mujeres que asisten a este evento de gran significación e importancia en la vida de cada una, así como también, a los hombres que nos acompañan, porque nos reconocen como sujetas de derechos y nos apoyan en nuestras incesantes luchas de resistencia frente a las discontinuidades de la realidad.
Hoy, en esta tarde de marzo, este prominente recinto que en tantas ocasiones ha sido testigo de los despliegues de cultura, creatividad e intelectualidad de un sinnúmero de personas, se ve colmado y engalanado por la hermosura de las mujeres protagonistas del presente que se construye, mujeres que se levantan y alzan sus voces con el fin de vindicar sus posturas de crítica en contra de las estrategias y prácticas patriarcales, que han desgarrado y pauperizado las condiciones de vida y han lesionado el ser de cada mujer, quien ha visto cómo en su cuerpo, considerado infortunadamente como “botín de guerra”, se reflejan las consecuencias de una guerra mordaz que amenaza día a día y que aumenta sus formas de permearse hasta los puntos más recónditos de nuestro país.
Adicionalmente han sido líderes y voceras para irrumpir en la escena pública y participar de las decisiones que se tejen en torno a la edificación de país, en escenarios que antes les eran vetados, exclusivos de los hombres, dejando clara y contundente huella, tal es el caso, que gracias a estos esfuerzos inconmensurables se han alcanzado resultados concretos, que han incidido en lo que hoy por hoy somos, y son precisamente los siguientes, algunos de los retos alcanzados: La ley 8/1932, que concedió a la mujer casada la facultad de administrar sus bienes de uso personal, las reformas constitucionales de 1936, 1954 y 1967, que respectivamente, nos concedieron el derecho a ocupar cargos públicos, el derecho a votar (Ejercido por primera vez en 1957) y la prohibición del despido durante la licencia de maternidad; la ley 51 de 1981, por medio de la cual se ratifica la Convención sobre la eliminación de todas las formas de discriminación contra la mujer; la Constitución Nacional de 1991 que consagró el principio de igualdad jurídica de la mujer en sus artículos 13, 43 y 53; y no podemos dejar de mencionar lo que ha sido la Ley 1257 de 2008, por medio de la cual se dictan normas de sensibilización, prevención y sanción de formas de violencia y discriminación con las mujeres, cada uno de estos logros se han erigido por el compromiso y responsabilidad social de las mujeres para con las mujeres, de otra forma, sería imposible haber logrado escalonar los sendos caminos que a través de la historia han experimentado.
Este año, le correspondió a la Casa de la Mujer y la Familia Stella Brand, más concretamente, a la Ruta Pacífica de las Mujeres la conmemoración de este acto solemne, pero que interesante se volcó la idea cuando la coordinadora Sonia Pachón nos indicó de que precisamente era Ruta Joven Risaralda la que abanderaría todo el evento, mención que no debo dejar pasar, pues hablamos desde una categoría social fundamental en el debatir de los conceptos que surten por las nuevas dinámicas sociales, en este sentido tenemos que l@s jóvenes representan la transición generacional entre los antiguos y nuevos valores; en Colombia, este grupo ha ganado amplías luchas y ha sido una constante de crítica frente a lo que se va considerando como absoluto e inmutable, nosotr@s con nuestras formas de ver el mundo, diversas y a la vez complejas, también nos hemos preguntado por la situación y vivencias de las mujeres del mundo, pero en especial, de nuestras mujeres, con unos problemas y puntos de referencia específicos, enmarcados en las condiciones de un conflicto armado de tantas décadas y que las ha transgredido de una forma tal, que es evidente cómo ha marcado sus perspectivas de vida y las significaciones de la misma; vemos con gran preocupación, el hecho de sumisión al cual nos hemos visto sometidas, como si fuéramos entes superficiales sin conocimiento y capacidad de razonar para performar, consideramos y estamos convencidas del poder subvertor de nuestros pensamientos, pero sabemos que nuestros objetivos serán cumplidos en la medida que fortalezcamos nuestros lazos colectivos, porque juntas somos una masa pensante y sólida, es así como por medio de los movimientos feministas como procesos de organización, de resistencia y subversión al orden patriarcal deben ser comprendidas nuestras actuaciones, como también, desde la construcción de individualidades e identidades feministas diversas, que se traducen en actos simbólicos, artísticos y significativos.
Todos los comportamientos que explayen las mujeres, atraviesan su cuerpo, como se mencionó con anterioridad, pero a la vez son muestra de la lucha constante por la autonomía de estas protagonistas sujetas sociales de derecho, donde se determina como un elemento inescindible la auto conciencia, concebida como un acto político en que se descubre y se afirma la identidad femenina.
No nos imaginamos, cómo sería nuestra participación en la actualidad sin el trabajo realizado por las mujeres del Movimiento Internacional Sufragista, en Colombia representado por Ofelia Uribe de Acosta, luchadora por los derechos de la mujer desde 1930, y Georgina Fletcher, quien logra organizar en el mismo año el IV Congreso Internacional Feminista, tampoco sin el aporte de Policarpa Salavarrieta, María Cano, Manuela Sáenz, como algunas de las más reconocidas, pero no sólo han sido ellas, las responsables de lo que poseemos hoy, sino además, y no con menos importancia, todas las mujeres, aquellas de todos los colores y sabores que desde sus casas y comunidades han dado ese “sí” por revolucionar las estructuras tradicionales, que las han estigmatizado en algunos períodos como “brujas, pecadoras, representantes de lucifer, incompetentes, incapaces”, en fin un basto número de expresiones peyorativas que no aducen la verdad de lo que somos, y son exactamente, estas mujeres las que condensan la fuerza de cambio, y para ejemplificar un poco el valor de las palabras de las mujeres que resistieron la confinación del silencio, me parece válido indicar algunas expresiones que han quedado perennes en la historia:
“Nunca entendí del todo… por qué… solo a las diosas les fue permitido compartir el mundo de los hombres. Ni por qué… las conquistas de las patrias, las tierras y los mares ha sido, casi siempre, territorio de los hombres”. (Manuela Sáenz).
“Vengo a decir que en los rincones más difíciles del planeta, están cantando las mujeres con voz de pueblo escarmentado. Se supone que vociferan para sufrir un poco menos” (María Elena Walsh).
“… los movimientos feministas, pueden convertirse en oportunidades históricas de cambio de revolución porque en sí mismos encierran diversos componentes de lucha y la posibilidad de proponer nuevos arreglos políticos, sociales y económicos” (Diana Marcela Gómez Correal).
En cada una de las palabras aducidas se observa un hálito de existencia y esperanza con sabor a libertad, que brota de las mentes imparables de mujeres impetuosas y valientes, que en cada tiempo repensaron su misión en la sociedad. Sin embargo, hemos sido testigos de la incompetencia de muchos de los medios de comunicación, que han tratado de tergiversar y reducir el rol de las mujeres, siendo consideradas desde el materialismo, la utilidad y el fetichismo, nos han ultrajado de las formas más siniestras, no solamente han demeritado el trabajo conseguido de nuestras antecesoras, sino que también nos han señalado como “débiles”; igualmente y en contraste, ha sido evidente cómo en los escritos o noticias publicadas se esconden tras un velo de espectáculo y amarillismo la realidad del número de feminicidios y el por qué de los mismos, consecuente con ello creemos que Colombia necesita tener una visión periférica y veraz de los sucesos que acaecen, es menester lograr una información pertinente y coherente donde se denuncien las diversas formas de ataque que denigran la mujer.
En este sentido, es casi una obligación, hablar de la estructura del Estado, encaminada a lograr los fines de la persona humana, no obstante, este cometido parece haberse olvidado, o simplemente se vuelve enunciativo, puesto que vemos cómo todo el andamiaje estatal se desarrolla con base a la guerra, y no en las soluciones de no violencia y paz que aclamamos, es así, como todas estas actividades, legitimadas bajo la legalidad, también han sido responsables de lesionar y atacar la vida de nuestras mujeres, quienes ven coartadas su libertad e integridad, así como muchos otros derechos que se les han desconocido, son ellas quienes sufren, sin haberlo pedido, las inclemencias de la guerra, han visto cómo mueren, desaparecen, torturan a sus hijos, esposos, padres, amigos, y han padecido los demás vejámenes que se puedan cometer. Hoy, decimos “No más”, el Estado debe entender que “Las mujeres no parimos hijos es hijas para la guerra”, consigna pura de la Ruta Pacífica, queremos un país donde podamos desarrollarnos libremente, en un ambiente armónico no violento, donde las grandes conquistas no sean las de exterminar con la vida de quienes se oponen al sistema y discurso institucional u oficial, sino las conquistas del conocimiento y del reconocimiento de la otredad, las conquistas del posicionamiento de las mujeres, las conquistas del respeto a la diferencia, las conquistas de la libertad y autonomía en contra de la determinación a una forma de actuar, estas deben ser algunas de las conquistas de este tiempo, dejando claro que la lucha de mujeres recorre un camino que deja huellas y lo más importante, es un hecho social, político e histórico irreversible;
Al principio de este escrito utilicé la palabra “sororidad”, muy conocida por quienes hacemos parte de la Ruta o hemos tenido algún contacto con ella, pero por qué la utilicé, porque ella representa una solidaridad especial, es la hermandad entre las mujeres, siendo un principio esencial para la Ruta, y que hoy, desde la propuesta joven, queremos compartir, debido a que creemos en ella, creemos que esa fuerza para ayudar a nuestro género, nos permitirá crecer y apoyar a aquellas que se encuentren en estado de indefensión frente a los guerreros y combatir por medios no violentos los actos bélicos. De este modo, cabe mencionar que nos declaramos “Pacifistas, antimilitaristas y feministas”, este último término hace alusión a que en la Ruta nos enmarcamos dentro del Feminismo de la Diferencia, puesto que nacemos como defensoras de la diferencia sexual, frente a los feminismos que se han denominado de la igualdad, por considerar que estos asimilan a las mujeres a los varones, y no logran construir una identidad propia por fuera del parámetro de lo masculino; proponiendo en este sentido, que las reivindicaciones se deben trasladar al plano simbólico y de valoración de lo femenino.
Hoy, queremos decirles que hacemos presencia con nuestras voces para ratificar los derechos obtenidos, pero además, para decirles que nuestra batalla continua, aún vemos cómo sigue la discriminación y la violación de los derechos de las mujeres, aunque muchos insistan en que aquella divergencia ha desaparecido, y por lo mismo, en este evento, es necesario e indispensable dar un enorme agradecimiento a todas las Mujeres, a las que estuvieron y se resistieron, y a las que siguen con sus legados, GRACIAS a todas y cada una de ellas, porque nos han mostrado que podemos aferrarnos a las ideas revolucionarias de la realidad, Gracias por creer en un mundo donde las mujeres sean actoras sociales, Gracias por adentrarnos en las espesas aguas que teje el patriarcado para enfrentarnos a él y reconocernos como protagonistas, Gracias, porque somos jóvenes críticas de la realidad y sujetas que proponen nuevos derroteros, Gracias porque avizoraron que somos capaces de erigir una sociedad, no desde la guerra, sino desde la mejor arma, la palabra, a través de los diálogos con argumentos, porque esta sí es nuestra batalla, batalla donde no habrá ni un muerto, sino discursos que demuestren cuán diferentes somos pero que nos permitan vivir en comunidad, gracias al respeto que podemos lograr. En este sentido, es obvio que el feminismo no ha desaparecido, es cuerpo teórico, práctica política y propuesta ética y cultural en permanente evolución y transformación.
Mujeres a la Carta, se convierte pues, en el escenario perfecto para exclamar que ahora somos nosotras, las mujeres de hoy, las protagonistas y las responsables de liderar los procesos de cambio que exalten el papel de la mujer en Colombia y en la historia, pues encarnamos las mujeres de cada tiempo, sin embargo, nuestra función cada vez se vuelve más compleja, ya que sobre nosotras no solamente recaen las violencias anteriores, sino además las nuevas formas de violencia, formas que iremos combatiendo con la ayuda de los hombres que se atrevan a repensar la sociedad, conexos a nuestros ideales, no crean que los hemos olvidado, este es un compromiso de todos, que nos vuelca a seguir resistiéndonos frente a cualquier forma de dominación y limitación, y frente a cualquier signo de guerra, porque más que un deber social, es un deber con nosotros mismos.
Pero cómo terminar mejor este escrito, que dejando la formulación de interrogantes que debemos resolver en la vida práctica, pues, si todos hacemos parte de esta sociedad: ¿Cuál es el reto ahora? ¿Qué proponemos para que las mujeres logremos ser efectivamente reconocidas y no discriminadas? ¿Cuál es el papel de l@s jóvenes? ¿Cómo queremos que se escriba la historia de ahora en adelante?, y finalmente, ¿Cuál es el aporte que daremos a las futuras generaciones?
Ahora sí, Feliz Día de la Mujer, y Muchas Gracias.
PRIMER TALLER DE INTERVENCIÓN EN EL ALBERGUE DE LA VIRGINIA
martes, 22 de marzo de 2011
domingo, 20 de marzo de 2011
El robo de la muerte femenina
a vivir, la próxima batalla será la de la muerte, la nuestra. Traducción Susana Merino
Esta reflexión es la versión integra del suelto publicado en Repubblica el 26 de febrero pasado y forma parte del libro Parola di Donna, la antología que estuvo a cargo de Ritanna Armeni para las ediciones Ponte delle Grazie. En las páginas de esta antología se encuentran cientos de mujeres que han dicho lo suyo sobre cientos de palabras que han cambiado el mundo, pero sobre todo los espacios del mundo para las mismas mujeres. La reflexión que sigue anticipa por tema (aunque no por redacción) la que estará en mayo en las librerías “Ave Mary”, tantas veces reenviada a la editorial que ya la han bautizado “Mary per sempre”. He tenido el infortunio de nacer cuando el movimiento de las mujeres ya no estaba al alcance, si alguna vez lo estuvo, de mi posición geo-anagráfica. En los años ochenta los ecos de las voces femeninas que reclamaban derechos y respeto ya se había atenuado, cambiados en discursos complejos en recintos cerrados, fuera de los cuales se escucharía cada vez un poco menos; mi generación mientras tanto crecía en otro lugar, en otra esfera del tiempo, atravesando las contradicciones pero sin reconocerlas. Por un lado me beneficiaba por las cosas obtenidas por otras, pero el sentido de aquella mediación no me había llegado. Por otra parte los monstruos que se combatían se habían vuelto pícaros y a los veinte años carecía todavía de instrumentos para oponerme al trasvasamiento de la vieja ética en una nueva estética. Comprendía confusamente que había que realizar una elección, pero si no podía ser ya la mujer-sujeto de los años sesenta, un modelo que me había llegado distorsionado e impracticable, tampoco me interesaba ser la mujer-objeto de los años ochenta, hija del culto a la apariencia que en aquel momento encontraba su punto máximo en la naciente tv comercial y en la nunca tán exigente dictadura de la moda. Otras mujeres resolvieron la contradicción volviéndose protagonistas de la libertad de seguir siendo objetos graciosos. En nombre de esa libertad no era fácil discutir esa elección; parecía sin embargo sensato afirmarse cambiando en arma lo que hasta ese momento había sido un campo de batalla de intereses ajenos. A quién como yo no elegía aquel camino solo le quedaba la legitimación profesional, idealmente enfundada en punitivos tailleurs pensado por una moda conservadora que nos constreñía a considerarnos competentes solo en traje de hombre. El modelo de la madre de familia cae en desuso, tanto que en aquellos tiempos se cristalizó exactamente la tasa de natalidad. Por primera vez en siglos la cantidad de muertos superó al de nacimientos y creo que fue exactamente en aquel momento que la muerte dejo totalmente de ser representada. Italia se hallaba presa de un crecimiento económico embriagante que imponía la equivalencia entre vida y activismo. Se abrieron gimnasios porque el culto a la eficiencia necesitaba sus iglesias. La productividad profesional se vuelve principio y desemboca en arribismo. El bienestar deja de ser un estado del alma y se transforma en una mercadería adquirible, se descubre que la juventud, la belleza son valores éticos y el consumo alcanza el rango de objetivo final de la orgía social que fue aquel decenio. Aquel relato del mundo, aunque profundamente mortífero no tenía ni podía tener modelos que representaran la muerte, sino en algunos filones de la contracultura que que murieron en nichos. El feminismo se reflejaba en la muerte sin dejar herencia. Solo quedaban las probadísimas traducciones sociales de las imprentas religiosas del catolicismo para las que la muerte es la consecuencia de una culpa ontológica. Una culpa, para ser preciso, solo de la mujer.
La historia que nos habían contado desde pequeñas era muy clara y no admitía descuentos: veníamos de un mundo perfecto, habíamos sido creados integros e integras, sin dolor, incapaces de morir y privados de toda urgencia, en un estado de beatitud permanente. No importaban los motivos por los que las condiciones habían cambiado, en el fondo a ¿quién le había importado que la mujer cayese en la tentación e indujese al hombre? Contaba solamente que desde aquel momento la muerte había entrado a formar parte de la creación, junto al sudor de la frente y los dolores del parto. Nos enseñaron que Eva, el único nombre sobre el que blasfemar fue siempre venial, significa madre de los seres vivos, pero también y sobre todo madre de los que mueren, principio imperfecto de una nueva generación obligada por su culpa a medirse con el desconocido concepto de límite. En aquel relato no estaba solo la cosmogonía con la que se nos han dado siempre explicaciones en esta parte del mundo. Para las mujeres era también una explícita condena de por vida, a la vida, la de los demás a costa de la propia, en una compulsiva reproducción sin ahorro ni posibilidad de elección. Así fue por siglos hasta que la lucha feminista hizo pedazos el ícono de la mujer factora. Los años ochenta tradujeron este resultado civil en una renuncia a la reproducción tout court porque la obsesiva manutención de sí misma parecía más que suficiente y así quedó.
La ancestral deuda femenina es todavía imposible de eludir. Haber establecido que dar vida es una elección y no una obligación no borra la culpa: la mujer que no da vida queda en todo caso como una adicta obligada a sus aspectos problemáticos, los que más estrechamente limitan con la muerte, la enfermedad, la vejez, el cansancio y el dolor. Es naturalmente femenino cuidarse, dice la vulgata del único país de Europa donde la mujer es un amortizador social; pero es solo otra manera de confirmar, que los defectos de la vida son los mismos confines de nuestra culpa ontológica, la única que no será olvidada en una civilización que ha cultivado el olvido. Si por lo tanto no queremos dar vida acríticamente, ocuparse de los propios límites no solo es oblación debida, sino vista con el paradojal agravante de, a nuestra vez, “no poder morir” ya que no está permitido consumirnos con dignidad mostrando nuestra edad. No podemos ni siquiera envejecer. Por eso de una mujer que no esconde sus años se dice que es “poco cuidadosa” revelando que el “cuidado” en un mundo como el nuestro no es otra cosa que la negación del límite.. El hombre, el macho, muere y lo sabe: lo ha aprendido por narraciones de siglos que lo quieren un héroe laico o un mártir religioso. Su muerte se ve como bella para ver y contar, es un lugar imaginario vivible, porque todos vivimos en los relatos que se han hecho de nosotros mismos. Pero para la mujer no es un lugar vivible en primera persona, porque siempre queda un espacio para cuidar a otro. Nadie nos ha dicho que moriremos sino que veremos morir a todos. Desde la madre del crucifijo hasta la última viuda argelina, la única muerte frecuentable es la de los demás a cuyos pies llora dolorosamente. Después de haber luchado para no ser obligada http://www.michelamurgia.com/di-diritti/bioetica/il-furto-della-morte-femminile
viernes, 18 de marzo de 2011
RUEDA DE PRENSA PROYECTO INTERVENCIÓN EN SALUD SEXUAL Y REPRODUCTIVA A MUJERES Y NIÑAS VÍCTIMAS DEL INVIERNO EN LA VIRGINIA, RISARALDA
miércoles, 16 de marzo de 2011
CONTIGO MUJER EN EL NOTICIERO DE UNE
El día de ayer 15 de marzo, la Directora Ejecutiva, Dra. Fabiana Betancourt estuvo en el noticiero de UNE, divulgando el proyecto de intervención con las mujeres y las niñas de los albergues del Municipio de La Virginia.
Se reiteró la invitación a la rueda de prensa el próximo viernes 18 de marzo, 8 a.m. en el quinto piso de la gobernación de Risaralda.
lunes, 14 de marzo de 2011
SEGUIMOS GENERANDO AGENDA EN LOS MEDIOS

Contigo Mujer en el canal Telecafé
domingo, 13 de marzo de 2011
SEGUIMOS EN LA DIVULGACIÓN DEL PROYECTO DE LA VIRGINIA
CONTIGO MUJER EN EL PROGRAMA RADIAL ENFOCADOS
CONTIGO MUJER PRESENTE EN LOS MEDIOS DE COMUNICACIÓN


miércoles, 9 de marzo de 2011
Ahora estamos en Facebook
TODO UN ÉXITO EL CIERRE DE LA CAMPAÑA SIN MI PUÑO Y CON MI LETRA
La recolección de firmas comenzó a partir de las 10 a.m. en varios puntos confluentes de la ciudad de Pereira, como el parque Guadalupe Zapata en el barrio Cuba, en el Colegio Tokio en la comuna Villa Santana y en la plazoleta Ciudad Victoria, donde representantes de la Red de Mujeres de Risaralda como proponentes y con el apoyo de la Alcaldía de Pereira, de la Policía Nacional, colegios públicos y privados y medios de comunicación estuvieron promocionando, recopilando el compromiso de los hombres por el respeto y el buen trato hacía las mujeres y las niñas.
domingo, 6 de marzo de 2011
Las mujeres demandan
Por Florence Thomas
Todo parece indicar que no existe una voluntad política gubernamental para responder a las demandas y necesidades de las mujeres colombianas. Muchos grupos y organizaciones de mujeres me están preguntando por qué las colombianas seguimos sin que nos nombren una Consejera Presidencial para la Equidad de Género.
He decidido hacer pública esta pregunta porque los espacios para la reivindicación, el reconocimiento y la realización de sus derechos siguen ocupando lugares de segundo orden en la dinámica institucional, como parece indicarlo el desmonte progresivo y silencioso de la Consejería. Un desmonte que constituye lo que podría llamarse la última estocada dentro de un largo y lento proceso de desinstitucionalización, desde cuando el gobierno de Andrés Pastrana decidió acabar con la Dirección Nacional de Equidad de la Mujer y volverla Consejería Presidencial para la Equidad de la Mujer, hoy día sin sede y casi desaparecida por la no renovación de contratos de las que ahí trabajaban.
Esto significa que seguimos sin una institucionalidad responsable del reconocimiento, promoción y garantía de nuestros derechos, a pesar de las múltiples expresiones del movimiento de mujeres que están demandando una respuesta inmediata. Es urgente nombrar en este cargo a una realmente comprometida con nuestros derechos; puede ser o no ser feminista, a condición de que reconozca los avances legislativos logrados por las luchas de las mujeres; lo contrario sería retroceder en la historia.
Basta recordar que todos los Objetivos del Milenio, sin excepción, tienen que ver con la vida de las mujeres: así se trate de erradicar la pobreza, de reducir la mortalidad materna o de promover la igualdad entre los sexos y la autonomía de la mujer, todos apuntan a una mayor atención a los derechos de más de la mitad de la población mundial. ¿Cómo avanzar en los Objetivos del Milenio sin garantizar que las colombianas cuenten con la voluntad explícita de los gobernantes para avanzar en políticas y programas que logren saldar la deuda histórica que el Estado y los gobiernos tienen con ellas?
Como residente en Colombia desde hace casi medio siglo, comparto las razones que tienen muchas mujeres de este país para expresar su indignación por los oídos sordos a sus insistentes propuestas de creación de un Ministerio de la Mujer y una Secretaría de la Mujer a nivel del Distrito Capital. Estas dos propuestas no están en la agenda pública de los gobiernos actuales, pero sí en las agendas políticas del amplio movimiento social de las mujeres. Sé que estas demandas tendrán que ser atendidas antes de que nuestra ancestral paciencia se agote. Entre tanto, lo menos que podemos esperar es que la aún débil institucionalidad existente se fortalezca y que los avances logrados en el campo de los derechos de las mujeres en Bogotá, en Medellín, en Cali, en Pasto, en Cartagena, en otros municipios y en algunos departamentos que ya cuentan con Secretaría de la Mujer, sean considerados en la Alta Consejería para las Mujeres y en los programas de quien sea designada para este cargo.
Hace exactamente 100 años se celebraba por primera vez, en el mes de marzo, el Día Internacional de la Mujer en varios países europeos. En Colombia fue en 1960 cuando las voces de las recién nacidas ciudadanas se unieron al clamor internacional. En este mes, con una ciudadanía ejercida desde hace 54 años, las colombianas instan al Gobierno Nacional a asumir públicamente sus compromisos con los derechos de las mujeres.
* Coordinadora del grupo Mujer y Sociedad
El día internacional de la mujer

Las diversas organizaciones y redes tienen una programación especial para la fecha, menciono algunas de ellas:
La Alianza por los Derechos de las Mujeres y la Ruta Joven (Mujeres jóvenes de la Ruta Pacífica de las mujeres) han decidido centrar esta conmemoración en hacer un recorrido por el aporte de distintas mujeres a la historia de nuestro país; empezando por la Gaitana, pasando por Manuela Beltrán hasta llegar a mujeres como Eulalia Yagarí, María Isabel Urrutia y Stella Brand. La Alianza, esta vez, le ha dado prelación a la voz de las mujeres jóvenes que harán una declaración pública de su compromiso con la construcción de un país con mayor equidad de género. Sus actividades estarán concentradas en la Universidad Tecnológica de Pereira.
La Red de Mujeres de Risaralda, junto con la Alcaldía de Pereira recolectará las firmas en tres puntos de la ciudad, en el marco de la campaña Sin Mi Puño y Con Mi Letra, que consiste en la firma de un pacto masculino de no violencia contra las mujeres y las niñas. Los hombres podrán firmar el compromiso de usar su puño para respetar los derechos de las mujeres, en tres puntos de la ciudad: Plazoleta Ciudad Victoria, Parque Guadalupe Zapata y Colegio de Tokio en Villa Santana. El menaje que quiere enviar la Red a toda la sociedad pereirana es que la violencia contra las mujeres y las niñas es inaceptable, intolerable, inadmisible, injustificable y, además, es un delito.
La Corporación Contigo Mujer hará presencia en el municipio de Dosquebradas, en el Colegio Cristo Rey. Durante las dos jornadas (mañana y tarde) las niñas y jóvenes de esta institución educativa atenderán una charla sobre los derechos que ampara la ley 1257 de 2008, “por una vida libre de violencias para las mujeres”.
Hago un homenaje a todas esas activistas defensoras de los derechos de las mujeres, con las que tengo el honor de compartir el trabajo por la igualdad de oportunidades para las mujeres de esta ciudad y del país, todas desde distintos ángulos luchamos por un mundo más justo. Mi homenaje en esta ocasión, más que un discurso político o unas palabras de gratitud quiere ser una dedicatoria artística. Revisando en mi biblioteca encontré un bellísimo libro sobre las pinturas de Renoir. Para mis compañeras de lucha y para todas aquellas que creen en la humanidad de las mujeres, dedico mi pintura favorita de este impresionista: Las bañistas, realizada entre 1918 y 1919 y que se encuentra en el museo de Orsay. En primer plano hay dos mujeres desnudas, tendidas plácidamente en un campo de flores, parecen conversando distraídamente en una actitud que demuestra absoluta tranquilidad y que no alerta sobre ningún peligro. Ese cuadro es una buena representación de la libertad interna y externa a la que tenemos derecho todas las mujeres del mundo.
viernes, 4 de marzo de 2011
RECONOCIMIENTO DE LA ALCALDÍA DE PEREIRA A DESTACADAS MUJERES PEREIRANAS
miércoles, 2 de marzo de 2011
INVITACIÓN RUEDA DE PRENSA
viernes, 18 de febrero de 2011
Alerta!
La Corporación Contigo Mujer registra con gran preocupación el caso de ablación de una niña de 7 días de nacida, conocido por la Personería Municipal de Pueblo Rico Risaralda y que fue puesta en conocimiento del Defensor del Pueblo Regional Risaralda. En conversación personal con el defensor del pueblo, éste le manifestó a la Corporación Contigo Mujer su compromiso de hacer seguimiento a las sanciones que la comunidad impondrá en este nuevo caso, pese al compromiso público de la Comunidad Embera Chamí de suspender definitivamente la práctica, en noviembre de 2010. Solicitamos de las organizaciones de mujeres y de las autoridades competentes la veeduría permanente en el cumplimiento de este acuerdo suscrito por la Comunidad Embera Chamí por el respeto de los derechos a la vida, la integridad y física y la salud sexual y reproductiva de las niñas y mujeres de esa comunidad.
lunes, 7 de febrero de 2011
ALGUNOS RETOS PARA LA NUEVA FISCAL GENERAL DE LA NACIÓN

JURAMENTO DE LAS MUJERES EMBERA CHAMÍ
Finalizado el encuentro, las mujeres juran acatar las conclusiones
La mujer en el movimiento indígena
Solany Zapata, Consejera del CRIR, área de la mujer
DESPENALIZACIÓN DEL ABORTO DESDE 2006

La Alcaldía de Pereira apoya la difusión de la sentencia C-355. Campaña de la Alianza por los Derechos de las Mujeres. Apoya la Mesa por la Vida y las Salud de las Mujeres
Campaña de seguimiento a sentencia de despenalización del aborto

Postal diseñada por Yorlady Ruiz
Taller inspectores y Corregidores
Realizado el 26 de junio de 2009 en la Defensoría del Pueblo, dirigido por la Alianza
Taller de Inspectores y Corregidores
La fundación Apóyame explica el decreto 444 del Ministerio de la Protección Social